naufragio

Enmienda


Enmienda 


Yo también me arrepiento de haber sido
joven en otro tiempo -en otra vida-
por suerte superado sin secuelas
de mayor importancia, cuando menos:

una noche de insomnio pasajera,
un pinchazo en el globo del orgullo,
un momento de lucidez extrema
que puedas apartar con sensatez.

A eso se reducen mis pesares:
un lamparón en traje inmaculado
que apenas deja huella si se frota.

Qué desperdicio de treinta y tres años,
de esperar sin saberlo a que llegaras:
inapelable prueba absolutaria

al límite del plazo perentorio.

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